jueves, 1 de enero de 2015

Lo mejor de este año, que ¡Gracias a Dios ya termina!

Siete años y acá terminan las ataduras, las tristezas, el dolor, las ansiedades y las culpas, lo que perdí ya no es mío, lo que deje lo tiene otro, lo que me dejó no me hacía falta, lo más importante es que están conmigo esos seres incondicionales que me quieren y aceptan tal y como soy con más defectos que virtudes, pero que ama profundamente y eso es algo que ni el tiempo, ni la distancia ni otros seres cambiarán nunca...

A Dios Gracias por los hermosos regalos que a lo largo de estos siete años me obsequió porque en algún momento quizás supo que me hacía falta un poco de alegría... y Mil gracias aún porque en mis pérdidas también me sostuvo y quizás aún más fuerte de lo que me ha tomado nunca, por consolar mi llanto porque él más que nadie sabe que nadie es tan fuerte como para soportar tanto, por esos momentos en que me sentí vulnerable porque a mi lado había tanto dolor como el que yo sentía y por eso tuve que ser aún más fuerte delante de otros... Por eso llanto silencioso que calma esa tristeza eterna de perder un ser tan amado, por ese soplo que de alguna manera me mantuvo a flote, por ayudarme a decir adiós a quien nunca habría querido ver marchar...

A Mi hermana Ritmary porque de todos los seres que pueden existir en este mundo fui la elegida para tener a un ser tan maravilloso, Dios es bueno, tenerte es saber que nada podrá derrumbarme aún cuando me encuentre caída...

A mi madre porque solo ella sabe lo que puedo sentir aún cuando no diga nada, por ser más fuerte que yo aún en esos momentos en los cuales yo no pude sostenerme más, a ella porque en otro brazos no habría sobrevivido, porque junto a otra persona quizás ya estaría perdida, no es solo querer lo que me ata a ti, es amor infinito y celestial... Dios es Bueno

A mis hermanos porque aún con nuestras diferencias nada puede separar a los seres que Dios y nuestros padres amarraron desde nuestro nacimiento, porque aunque ya no dormimos en la misma cama, siempre tendremos el mismo techo, el mismo amor, las mismas fuerzas y los mismos padres... Dios es Bueno

A mi padre porque solo el tiempo puede enseñarnos que perdonarnos es el mejor paso para cerrar ciclos y que perdonar te hace libre... Dios es Bueno

A mis sobrinos, porque ellos sabrán que solo el amor y la unión mantiene a flote una familia... Dios es Bueno

A mis tías porque son el reflejo de mis mejores momentos, la alegría que se me escapa en esos momentos en los que los recuerdos llegan y me traslado a esos años en los cuales sus cuidados y amor curaron heridas de caídas, esos golpes de mi niñez que hacen que hoy, sienta infinito amor por ellas... Dios es Bueno

A mis primos, porque los mejores momentos de mi vida los tengo al lado de cada uno de ustedes, compartir, aunque sea la mitad del tiempo que antes hacíamos, es sentir agradecimiento por tenerles, por conocerles, por emplear un tiempo que se convertirá en momentos que recordaré por siempre... Dios es Bueno

A esos pocos a amigos que aunque ya no veo sé que fueron sinceros, por eso son y serás mis amigos... A esos amigos nuevos, porque creo que aún no saben ni la mitad de lo difícil que es tenerme como amiga, pero ellos aceptaron ese reto... Dios es Bueno

A quienes a lo largo de estos siete años se fueron con la aurora, con el rocío de la mañana o mientras el día se hacía noche... Dios es Bueno

A esas equivocaciones que pusieron en duda mi amor en otro, mi lealtad, mi confianza, quizás perdí esos sentimientos para otro, pero eso solo me hizo entender que ellos en realidad no conocen lo que soy, no saben que mi entrega va aún más allá que sus dudas y desconfianza, ellos no valían lo que creí, por eso los perdí, Dios quitó la máscara de mis ojos, al final no fueron ellos los que descubrieron algo en mí, fui yo la que supo que ellos no tenían cabida en mi vida... Dios es Bueno 

A mí misma, porque a lo largo de estos siete años demostré que la debilidad no vive en mí, porque soporte lo insoportable, dolores inimaginables y sin embargo cada día, aun con mis dudas y resignación tenía la certeza que allí estaba Dios trabajando conmigo, con mis temores, sanando mis heridas, tomando mi mano, susurrándome una y otra vez "Tú puedes" solo él sabe que fui, soy y seré fuerte... 

Siete años que terminan hoy 31 de Diciembre de 2014. Siete años que no fueron tan buenos, pero que dejaron enseñanzas indestructibles, me enseñaron a confiar en mí, me hicieron más terrenal ya que debí levantarme del suelo muchas veces... Siete años que suelto cual globo con la certeza que se llevaran lejos todo lo que no merezco...

"Al Fin siete largos años que terminan hoy"
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